Según la Real Academia Española, un párrafo es «un fragmento de un texto escrito en prosa y constituido por un conjunto de líneas seguidas, y está caracterizado por el punto y aparte al final de la última», pero se puede dar una explicación más amplia si se atiende a su contenido, ya que se ve como un conjunto de oraciones que giran en torno a una idea en común.
Cada párrafo se organiza dependiendo de su contenido y naturaleza (por ejemplo: no tiene la misma estructura ni extensión un párrafo de un texto perteneciente a una noticia, que un párrafo descriptivo de un manual). Por ello encontramos diferentes tipos de párrafo según el tipo de texto (texto narrativo, descriptivo, argumentativo, etc.):
- Párrafo de enumeración.
- Párrafo de secuencia.
- Párrafo de comparación-contraste.
- Párrafo de desarrollo de un concepto.
- Párrafo de enunciado y solución de un problema.
- Párrafo de causa-efecto.
Otro criterio por el que se pueden diferenciar los tipos de párrafo es atendiendo a la justificación, el sangrado y el interlineado. Se pueden diferenciar cinco modelos de párrafo:
- Párrafo ordinario: con sangría en la primera línea y justificado a ambos lados.
- Párrafo en bloque o alemán: sin sangría, pero con una separación de media línea más entre párrafos para diferenciarlos.
- Párrafo de sumario francés: con sangría en todas las líneas, exceptuando la primera, y justificado a ambos lados. Este tipo de párrafo es muy utilizado a la hora de hacer las bibliografías.
- Párrafo en bandera: sin sangría y solo con la justificación a uno de los lados